Resulta
no ya difícil sino doloroso juzgar una película como esta, un producto
destinado al entretenimiento más pasajero y trivial que, aun contando con un
trío de actores carismáticos (y algún secundario de relumbrón) carece de las
más mínimas pretensiones artísticas que permitan rascar siquiera un mísero
aprobado al invento.
Cierto
es que en el terreno de las comedias románticas todo está ya muy trillado y es tentador contentarse con
muy poco, pero lo cierto es que a priori había elementos que invitaban a pensar
que esta comedieta podría hacerse un hueco en la medianía general, aspirando
incluso a sobresalir ligeramente merced a algún diálogo inteligente (y la
excusa de que tanto el protagonista como su padre sean profesores universitarios
especializados en el terreno de los románticos le iba que ni pintado) y alguna vuelta
de tuerca que destacara entre lo trillado del argumento.
Pero
a la postre, viendo el despropósito fílmico que ha parido un director, Tom
Vaughan, que va de mal en peor, con un guion tan errático que uno no tiene ni
idea de lo que pretendía contar su autor, ni siquiera el trío de guapos (mucho
mejor actores de lo que demuestran en esta película) salva la función.
Vale
que el argumento sea previsible (un profesor se enamora de su alumna y se casa
precipitadamente con ella debido a su embarazo, pero con el tiempo descubren
que no están enamorados y que es la hermana de ella quien realmente le hace temblar
el corazón a él), pero si por lo menos estuviese bien desarrollado uno podría
contentarse con esas migajas de carisma que derrochan sus desaprovechados
protagonistas. Pero un ritmo errático, un
montaje confuso y unas relaciones mal dibujadas hacen que este film, que
pasó desapercibido en su momento y que he recuperado en los albores del año
gracias a la segunda oportunidad (a todas luces inmerecida) que algunos cines
le han otorgado, hacen que su visionado sea una triste pérdida de tiempo.
Es
todo tan superfluo, tan nimio, que ni siquiera tiene los arrestos suficientes
para llegar a ser una mala película. Es, simplemente, una sosería fílmica que
solo se puede recomendar a un público muy conformista en una tarde de domingo
sin futbol. No da para más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario